Era obvio imaginar que el sabor de tanta fiesta se iba a tornar repentinamente amargo; lo malo, ha sido no estar en perfectas condiciones como para darme cuenta del inevitable final … pero, como siempre digo, lo que no me mata me hace más fuerte, y esa fuerza la aprovecharé para hacer lo que realmente quiero, y con quien realmente quiero, dejándome de tonterías que no me aportan nada. De esta forma, los planes anotados en la agenda viajera, van creciendo poco a poco, a la vez que se reducen las personas que estarán en dichos planes. Muy pronto os iré hablando de estos nuevos planes.