La verdad es esa, que no hay ninguna novedad que comentar; aquí sigo, delante del ordenador mandando currículums, y ojeando las páginas de empleo a ver si dejo de estar ya en la lista del paro. Con respecto a Berlín, todo sigue igual que estaba en la última entrada que escribí; algunos de los siguientes viajes, dependen de lo que se hable en Berlín, al igual que Berlín dependía de lo hablado en Tenerife; y por último, con respecto a Semana Santa, seguimos dialogando y barajando posibilidades, mi novia, mis hermanos y yo; nos gustaría que fuera algún país nuevo, o alguna isla griega o portuguesa, pero no sabemos como andará la economía … así que, de momento, hasta que no carguen nuevas ofertas, seguiremos esperando.
Aprovecho esta entrada al blog, como cada mes, para desearle a mi novia, un FELIZ DÍA 25, ese día tan especial en el que los dos miramos simultáneamente el calendario, y nos damos cuenta de lo bien que hemos ido sabiendo superar todos los baches del camino, y casi 12 años más tarde poder afirmar que seguimos juntos.